Es un libro sobre vidas y recuerdos.La vida de la protagonista y
los recuerdos de las personas que pasean por el relato.
Cuando su vida se rompe,decide viajar a California y disfrutar
de una beca para realizar un estudio sobre el legado académico
del profesor Fontana,un español que decidió abandonar su país
lleno de miseria y hambre,y que se asentó en Santa Cecilia donde
transcurren los acontecimientos de éste libro.Allí en un sótano
de la universidad se encuentran las cajas con el legado de Fontana.
Mientras la profesora Perea desgrana y clasifica los archivos,irá
conociendo a las personas relacionadas con él,entre ellos Carter
pupilo del profesor y del cuál conoceremos su vida a lo largo de
los capítulos,y que se convertirá en parte importante del relato.
El legado de Fontana les llevará a descubrir el paso de los frailes
españoles por aquellas tierras en busca de la evangelización a los
indios.Aunque quizá en este entramado en el que la autora nos
quiere sumergir,sobre las misiones a las que Fontana dedicó sus
últimos años,resulta enrevesado al lector y hace difícil coser la
tela de la historia que nos quiere contar.
La manera de describir la vida de los personajes es cercana
y certera,no así tanto lo que nos necesitan contar pues al final
del libro te sientes perdido intentando hilar qué era exactamente
lo que entre tantos acontecimientos tenía la suficiente relevancia
para empujarla a escribir el libro y a que no dispersara la historia.
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